Quien suscribe este espacio, recientemente conversó con
una de las tantas personas, que ha tenido el fútbol de salón de Venezuela, cuyo
paso activo por el deporte de mayor practica en el país dejó algunas enseñanzas
positivas, tanto para ella como para quienes aún permanecen en el mismo. Se
trata de Hanna Quijada, sus amistades cariñosamente le dicen “la negra”. Con
ella se realizó una conversación amena, muy llevadera y de respeto como ha sido
siempre, se hace el tiempo para tratar puntos que bien pueden observarse,
tratarse y efectivamente llevarse desde la academia y otros espacios del
aprendizaje dentro y fuera del fútbol de salón.
En la conversación realizada con Hanna Quijada, se
coincidió en cuanto a un tema que es bien fundamental en la práctica del
deporte dentro del rectángulo de juego; en dicha ocasión el tema fue sobre el
comportamiento que debe tener quienes actúan en la mesa de control, quienes se
desempeñan como anotador, cronometrista u otra responsabilidad que le sea
asignada en tan importante espacio, como lo es la meza de control. Debe haber
un trabajo de mucha responsabilidad antes, durante, y luego del juego para el
cual es asignado el personal que trabajará en la mesa de control. Más que un
protocolo, al momento de dirigirse a jugadores, directivos, entrenadores, y
público en general el trato debe ser de respeto y preservación de los valores.
Tratar a los demás como quisiera que le traten a usted.
Al momento de realizarse el juego, debe haber una
concentración a favor de lo que sucede dentro del rectángulo del mismo, una
atención plena en todos los sentidos, debe haber una vinculación directa con
los árbitros que participan en el juego, y tener ojo avizor con lo que sucede
durante los minutos de juego; quienes están en la mesa de control no deben
distraerse por ninguna situación, muchos menos provocar la distracción en
alguno de sus compañeros, ya que esto pudiera provocar algún error o errores
que lógicamente van en detrimento de los jugadores y de los equipos, dejando
mucho que decir de quien actúa en la mesa de control.
Una conversación amplia, y de mucho gusto fue la
realizada con Hanna Quijada, quien no sólo fue excelente en sus tiempos como
actuante en la mesa de control, sino que además, su clasificación siempre fue
la máxima dentro de lo que designa la organización que rige los árbitros y
anotadores de Venezuela. Dejó dentro de sus colegas árbitros y anotadores la
mejor de las impresiones en cuanto al talento demostrado por ella, dentro de
los juegos como en las actividades de formación organizadas por los árbitros de
los colegios regionales, y nacional. Otra de las coincidencias con Hanna, es en
cuanto el deber ser, luego de que culmina el juego; atender las observaciones y
las interrogantes de la mejor forma e incluso ir más allá de lo que ordena la
normativa, pero siempre en bien y a favor del desarrollo de la que espera la
sociedad en general.
Amigos lectores, agradecido de su atención, no olviden
ser la mejor de las referencias para esta sociedad, que mucho necesita de usted
y de otros. Quien suscribe sigue el ejemplo de Hanna Quijada, para avanzar en
los mejores términos y para que todos ganen en tiempo y oportunidades. Para
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